El otro día jugamos Cerrobruma, aventura propia de Symbaroum. Juego, por cierto, que nunca habían probado los asistentes. Nos quedamos a la mitad de la aventura, porque sólo pudimos jugar dos horas y media, y eso que le imprimimos un buen ritmo. Hubo momentazos muy peliculeros. ¡Deseando continuarla!
De izquierda a derecha: Xiao, Kiko, Ale y Antonio |